El pequeño protagonista seguro que se alegra y se sorprende si eres tú quien realiza las bolsitas de chuches que entregará a sus amigos.
En este post te presentamos una sencilla receta con la que podrás realizar de forma sencilla chuches de todas las formas y sabores.
En primer lugar necesitaremos:
- 200 gramos de agua (puede sustituirse por leche o zumo si lo prefieres)
- 300 gramos de azúcar
- 1 sobre de gelatina del sabor que quieras realizar las gominolas (85 gr)
- 2 sobres de gelatina neutra (10 gr cada uno)
- Azúcar i azúcar glas para el rebozado
- Aceite de girasol (mejor que el oliva para que nuestras chucherías no cojas sabor)
- Moldes de gelatina con la forma que queramos dar a las gominolas (sirven los moldes de gelatina para hielos)
- Un pincel de cocina
Una vez tengamos todos los ingredientes necesarios, comenzaremos pintando con el pincel de cocina los moldes de silicona con el aceite. Haremos esto para que las gominolas no se queden pegadas al molde y nos sea más fácil extraerlas posteriormente.
Sin dejarlo enfriar, verteremos el líquido en los moldes de silicona. Esperaremos 6 horas hasta que se haya enfriado o si tenemos prisa aceleraremos el proceso metiéndolo una hora en la nevera.
Cuando estén frías, las desmoldaremos y las rebozaremos del azúcar que hayamos seleccionado.
Con estos sencillos pasos ya tendremos nuestras golosinas preparadas y solo nos faltará meterlas en saquitos de plástico transparente, cerrarlas con una lazo del color que prefiramos y añadir una dedicatoria para el comulgante.
También puedes ver otra receta para hacer golosinas caseras en este enlace.