Crepes salados, los nuevos bocadillos

El crepe es una receta  de origen bretón que se ha popularizo mucho en los últimos años, tanto en Europa como en el resto del mundo. Los crepes están hechas, fundamentalmente, de la mezcla de harina de trigo, con la que se elabora una masa en forma de disco. Se popularizaron primero como postres, utilizando frutas, chocolates, cremas de leche o mermelada. Sin embargo, los crepes salados cada vez son más habituales en todo tipo de restaurantes.

Receta: La preparación de la masa para un crepe salado es prácticamente igual .Necesitarás 25 g de harina (o 60 g de harina de trigo, harina de trigo sarraceno 60g), una pizca de sal, dos huevos batidos, una lata de cerveza (este consejo es opcional, aunque adquiere un sabor muy especial) y unos 75 gramos de mantequilla.

Preparación:

Crepes de atún

Crepes de atún

  1. Batir la harina en un bol y batir con el azúcar, si se utiliza, y la sal.
  2. Añadir los huevos y el líquido, luego añadir la mantequilla derretida y otros condimentos, en el caso de utilizarlos.
  3. Lo que más gusta de los crepes es que nunca una tiene el mismo sabor que la anterior, además de poder preparar de tantos sabores como imagines, puedes jugar con la masa para hacerla algo más especial. La mezcla debe tener la consistencia, para ello puedes utilizar un poco de nata líquida – si es demasiado gruesa, añade después un poco más de leche o cerveza.
  4. Una vez haya reposado la mezcla se prepara el postre en forma de disco, y se fríe con aceite en la sartén. Es importante que el crepe quede totalmente cubierto con aceite. También es aconsejable utilizar una sartén con un sistema antiadherencia de calidad, que permita que puedas hacer cada crepe sin que se fracture o se agarre al interior de la sartén.
  5. En cuanto a los rellenos, puedes utilizar cualquier tipo de combinación. Por ejemplo, un interior de jamón de york y queso, una receta que conquista cualquier paladar por su delicadeza y suavidad. Nosotros recomendamos incorporar una fina capa de mantequilla o queso de untar en el crepe y tostar el jamón de york en pequeños tacos.
  6. También recomendamos incorporar especias al plato. Por ejemplo, una crepe de pollo cambia radicalmente si la preparamos con un poco de mantequilla y curry, añadiendo muy pocas calorías. Es una buena forma para sorprender a los amantes de la cocina exótica, con productos que puedes encontrar en cualquier pequeño comercio o supermercado.

Las ideas son múltiples, por eso… cada vez más se interpretan como una opción saludable y económica para remplazar las meriendas, y no precisamente por bollería industrial o alimentos con alto contenido calórico de energía vacía. Y, si os habéis quedado con ganas de prepararos un crepe… aquí tenéis dos recetas estupendas: salada y dulce.